Con el beneplácito de la Casa Blanca, la organización secreta llamada El Campus entrena a futuros agentes, cuyo trabajo será ejercer de justicieros en nombre de los Estados Unidos. Tienen un lema muy claro: todo vale contra los terroristas. Los protagonistas son 2 hermanos gemelos, que son preparados para ser las fauces del tigre . También conoceremos a Jack Ryan Jr, el hijo del habitual protagonista de este escritor. Nos encontramos con la típica historia de adiestramiento de unos personajes más o menos capaces, que pasan a ser la caña. Con la excepción que el clásico final, repleto de acción y adrenalina, aquí se queda en casi nada, y queda pendiente de la 2ª parte de esta historia. Si a eso añadimos que los terroristas son bastante inútiles, la sensación que nos deja el libro al terminarlo es más bien descafeinada. Todavía me sigo preguntando que le ve la gente a este autor, y porque le he vuelto a dar una segunda oportunidad, después del mal sabor de boca que me dejó la primer...